La Asociación Deportiva San Carlos U17 venció 3-0 al Municipal Grecia en la tercera jornada del torneo élite de esta categoría. El encuentro se jugó la mañana de este domingo 10 de octubre en el estadio Carlos Ugalde de Ciudad Quesada.
A pesar de ser un marcador contundente, para quienes vimos el partido quedó la sensación de que la diferencia numérica no fue para nada, el reflejo de lo que pasó en el campo de juego.
Superioridad en los 90
Es habitual que durante el partido de fútbol un equipo lo maneje por ratos y de pronto el rival se recupera y asume el control. En este, existió un monólogo futbolístico. El resultado final se vio atenuado por el buen trabajo del portero del conjunto visitante, José Jiménez y de una zona defensiva aplicada y con el afán de cometer pocos errores.
Los goles
Pudieron al menos duplicarse, a juzgar por las oportunidades, pero llegaron 3. El primero lo consiguió José Ignacio Hernández a los 18 minutos. Fue un gran pase de Santiago Corrales, el cual habilitó al delantero que tuvo el acierto de adelantarse a la marca de David Pérez, para de pierna derecha levantar la pelota y con remate cruzado vencer a Jiménez.
La segunda anotación se produjo en un lanzamiento de esquina. El balón llegó colocado sobre la línea de los 5,50. Ahí la capturó de cabeza Aaron Umaña y con un gran gesto técnico resorteó para colocarla sobre el paral derecho del portero y en rebote, ingresó para el 2-0. Así terminó la primera parte.
Solo uno más
El Municipal Grecia no tuvo mucha respuesta para el segundo tiempo. Más bien el técnico sancarleño ordenó el ingreso de Fabricio Hidalgo, Fabián Arroyo y Melvin Soto. En este último, encontró mucha producción de juego y posesión de balón.
La tercera anotación apareció en apenas 2 minutos del complemento. Una incursión por la izquierda de Enmanuel Arias, encontró en la boca del marco rival a Harold Saborío el cual simplemente tuvo que colocar el borde interno del botín derecho para enviarla al fondo.
Todo hacía presagiar que los goles vendrían en buena cantidad en el resto del partido. No ocurrió así. Incontables llegadas pero sin la efectividad requerida. Silbo el árbitro Johan Vega el final y el marcador fue de apenas 3-0.
¿Hubo esa relajación mental subconsciente que llega cuando parece que tenés todo bajo control?