El deporte puede llevar a sus actores a lugares impensados, muchas veces los más grandes sueños se cumplen gracias al deporte. En el caso de Steven Román, quien es sancarleño y tenista de mesa, el deporte los ha llevado por distintas partes del mundo a competir y hasta llegar a los pasados Juegos Paralímpicos Tokio 2020.
Primero pasos
Los primeros pasos de Steven en el deporte se dieron a los nueve años. Recuerda que primero fue en su casa donde arrancó con una mesa que tenían sus papás. Luego en los recreos de la escuela aprovechaba para practicar más y así poco a poco fue subiendo su nivel.
Su primera experiencia llegó cuando apenas tenía 15 días de haber empezado a entrenar. Esa primera competición fue el torneo nacional que se realiza en el país. De esa primera experiencia, Steven reconoce que lo que más ha cambiado es el hecho de que el deporte, pasó de ser solo una pasión a convertirse en su día a día.
Juegos Paralímpicos
Este año Steven reconoce que no ha estado en su nivel deseado. El sancarleño califica el año como uno de altos y bajos. Sin embargo, tuvo la posibilidad de ir invitado a los Juegos Paralímpicos de última hora. Ahí tuvo la posibilidad de enfrentar a los mejores del mundo.
Es lo máximo soñaba desde pequeño estar ahí, desde que veía a otros atletas estar ahí.
Román contó que las experiencias que vivió en territorio nipón son de otro nivel, además, del orgullo de representar al país. Precisamente en los Paralímpicos tuvo la posibilidad de ser el abanderado en el desfile previo a las justas.
Ahora la mira se pone en 2022 donde espera volver a clasificar al mundial, buscar quedar campeón en Juegos Panamericanos Juveniles y seguir compitiendo afuera del país principalmente en Europa.
Familia
La familia de Steven ha sido pieza fundamental para que el sancarleño puede llegar hasta donde está hoy en día. Pues su dedicación hoy es al 100% para el Tenis de Mesa. Alguna parte del año entrena en San José, pero reconoce que en San Carlos, al estar en casa es donde se siente mejor.
El deporte le ha enseñado a entender que ninguna discapacidad pueden ser un límite para cumplir sus sueños. Además, de tratar de ser cada más profesional en lo que hace y saber que pocos deportistas en nuestro país tienen la posibilidad de vivir del mismo.
El sancarleño sigue con su mira puesta en mejorar cada día sus habilidades para buscar metas más elevadas. Desde nuestra redacción le decimos: «Todo es posible para el que cree!
