Presentamos la primera de una serie de cápsulas, en las cuales Carlos Acosta Evans, el Capi que alzó por primera vez la Copa de Campeón para San Carlos, emite su voz ante las interrogantes que surgen sobre el trabajo de las ligas menores. Ahora, él es el coordinador de ese departamento en los Toros del Norte.
El hecho de vestir la camiseta de un equipo con más de 50 años de historia debe respetarse. La Asociación Deportiva San Carlos representa a uno de los cantones más importantes del país y de hecho, es el más extenso de Costa Rica por encima de provincias enteras como Cartago y Heredia. Ese orgullo, ese sentimiento de llevar pegado al pecho un escudo que representa a miles de aficionados a este equipo, es uno de los elementos que intenta rescatar la dirección de las Ligas Menores de San Carlos.
Carlos Acosta Evans tiene ahora esa responsabilidad. Este ex-futbolista, originario de Bribri de Talamanca, vivió dos periodos como jugador en la Asociación Deportiva San Carlos. Su primera etapa fue del 2007 al 2012. La segunda, del 2017 cuando llegó a integrar al equipo en la Segunda División, fue campeón de Liga de Ascenso en enero de 2018. En junio de 2019 alzó la copa en Primera División en el único título que ostenta la institución en la máxima categoría. Por eso, puede hablar con propiedad a los muchachos que saben de su liderazgo como El Capi campeón.
Conocedor de su responsabilidad, ahora fuera de la cancha, Acosta explica los esfuerzos que se han realizado para dar continuidad al proyecto de la Ligas Menores. La pandemia obligó a suspender los torneos de Liga Menor de UNAFUT. Esto trabajo consigo cambios sustanciales también en este «andamio» tan importante para el presente y futuro de un equipo de fútbol.
Los padres de familia son indispensables
-Los padres de familia han sido fundamentales para la organización- resalta el Capi. Respira tranquilo y piensa para emitir sus frases, tras cada una de las consultas u observaciones que le hacemos durante la conversación. Afirma que ha sentido un gran respaldo y un compromiso absoluto de los padres de familia hacia el club. Cualquier equipo de fútbol del mundo que busca ser exitoso, difícilmente pueda hacerlo sin la colaboración oportuna y efectiva de las familias de sus jugadores.
Acosta, explica cómo durante la etapa del confinamiento, se hizo necesario apoyarse en las posibilidades que la tecnología ofrece para dar seguimiento al trabajo de los chicos. Al regresar a la presencialidad, la tarea principal ha sido enfatizar en la recuperación de fundamentos básicos. Sí, aunque parezca exagerado, se vieron afectados de manera significativa. Se insiste en reforzar las virtudes de cada quien, pero al mismo tiempo, en corregir las carencias que se detectan en muchos jugadores.
Es posible que usted se esté preguntando, ¿bueno, y con todo eso que dicen, hay realmente jugadores en las Ligas Menores de San Carlos preparados para llegar a Primera División? En nuestra cápsula de mañana La Voz del Capi, tendrá la palabra.